La pasada madrugada del miércoles estalló un atefacto en una inmobiliaria de Cangas (Pontevedra), el delegado del Gobierno en Galicia, Manuel Ameijeiras afirmó en la mañana del jueves que "puede que haga pensar que está relacionado con el grupo que reivindicó otros artefactos colocados en tiempos recientes", aunque dejó claro que este atentado no se lo ha atribuído nadie.
Esperemos que esto haya sido un acontecimiento puntual, pero debemos analizar que gracias al bipartito formado por el PSOE y el BNG que gobierna en la mayoría de los municipios y en la Xunta (no por ganar las elecciones, sino por el despacheo), ha llevado al nacionalismo gallego hasta puntos que nunca en su historia llegaron a consegui, esos nacionalistas radicales ahora se sienten poderosos.
Después de muchos años un grupo nacionalista gallego puede decidir muchos tema en la Xunta, cosa que no me parece ni medio normal. Se supone que estamos buscando una Unión Europea sin froteras, de libre circulación de mercaderías y de personas, con aranceles comunes entre nosotros y cara terceros países, pero en España se ha puesto de moda el levantar las fronteras, de buscar las independencias de las Comunidades Autónomas más conflictivas a lo largo de la historia de España.
La culpa de todo esto la tiene el Señor Rodriguez Zapatero, persona que le ha dado alas a los terroristas vascos mediante esas negociaciones y que le da ideas a los nacionalistas/terroristas gallegos (con este tengo que aclarar que no piense que todos los nacionalistas gallegos son terroristas, pero si un grupo de personas que entienden de manera muy distinta los nacionalismos y la políticia, llevnadolo a segmentos muy radicales).
Pero el Señor Anxo Quintana no se ha quedado corto a la hora de experesar su "enérgica condena" diciendo que no hay nada "más lejano al sentimiento y forma de ser de los gallegos que la violencia de estos actos", pero es el el que intenta dividir a los gallegos del resto de España, metiendonos por los ojos el gallego, obviamente que hay que sentirse orgulloso de ser gallego y hablar el gallego si a cada persona le apetece, pero el Señor Quintana, pretende obligarnos a hablar gallego hasta en el extranjero.
Pero no contento con sus palabrass electoralista dijo que ""no es el momento adecuado para crear alarmas innecesarias", esperemos que esa alarma no llegue tarde y que esto no se les vaya de las manos. Se supone que se aprende de los errores del pasado, por tanto ya se ha permitido durante muchos años una banda terrorista armada llamada ETA, la gran lacra de España, haber si en vez de una van a ser dos lacras.
Solo me queda por decir uno de esos refranes tan sabios de la tradición española: "MAS VALE PREVEENIR QUE LAMENTAR"
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